El ciclo de la motivación o ciclo motivacional es
el proceso mediante el cual las necesidades condicionan el comportamiento
humano llevándolo a algún estado de resolución, creando diferentes estados que
llevan a la persona a desarrollar un comportamiento que si es eficaz,
encontrará la satisfacción de la necesidad, donde satisfecha la necesidad, se
vuelve al estado de equilibrio y a su forma natural de adaptación al ambiente.
Las etapas que comprenden el ciclo motivacional
son:
Equilibrio Interno: se refiere al equilibrio del
organismo humano
Estímulo: la aparición de un estímulo genera una
necesidad
Necesidad: la necesidad hace que en nosotros nazca
un estado de tensión
Estado de tensión: es un estado de desequilibrio o
tensión que nos conduce a realizar una acción
Satisfacción: satisfecha la necesidad se retoma al
estado de equilibrio
A medida que el ciclo motivacional se repite, la
persona va aprendiendo, generando que los ciclos venideros sean más eficaces
para alcanzar nuevas necesidades
Teniendo en cuenta el sistema de las personas y las
profundas diferencias individuales podemos inferir que el hecho de satisfacer
una necesidad no es motivación.
La
personalidad del individuo nos da una pauta para saber si se moverá la
motivación adecuada del estímulo que reciba.
“Para
las personas inteligentes no existe la suerte, pero si la oportunidad”: esto
plantea que aún en la adversidad ven siempre una oportunidad de mejora y poder
demostrar su capacidad, independiente de si la motivación que reciben es un
elogio o un regaño.
La
responsabilidad es otra característica importante puesto que es la capacidad de
elegir entre un conjunto de alternativas, la mejor, concatenando la
responsabilidad con la capacidad que pueda tener para tomar decisiones
adecuadas.
El entusiasmo es el interés llevado a su máxima expresión, por lo tanto si una persona es entusiasta existe una gran posibilidad que tenga un gran interés en lo que se le diga o lo que le toque hacer.
También hay ciertas personas que por más que se le den estímulos no tendrán la motivación que se espera de ella. Este ve su medio como una tortura, un castigo y reacciona defensivamente. Este tipo de personas no serán sujetos que se puedan estimular para lograr que su desempeño aumente.
Los deseos y necesidades se pueden clasificar de dos maneras: básicas y personales y dependiendo de la necesidad que se quiera satisfacer le asignará un valor prioritario de necesidad que será el deseo por obtenerlo.
Básicas: el alimento, casa, agua, vestuario, salud y educación
Personales: son los deseos que manifiesta la personalidad de la persona para sentirse más cómodo; que son requisito para una vida decente.
La motivación obtenida depende en gran manera a la personalidad del individuo y de qué tan prioritario es satisfacer esa necesidad.
Los objetivos y metas se fijan en el momento en que se plantea la necesidad, confeccionando un camino para cumplir la meta.
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